[nettime-lat] 'Faltan ciudadanos de la red'

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'Faltan ciudadanos de la red'
http://www.reforma.com/cultura/articulo/089631/

El teórico de los medios de comunicación Raúl trejo Delarbre señala que los
consumidores de internet tienen poco interés en generar contenidos, mientras
en el país es necesario discutir qué quiere la sociedad de la red
Por AMÉRICA JUÁREZ/ Reforma


'No tenemos una sociedad con cultura cívica, ciudadana de la red de redes',
afirma Trejo Delarbre. 

En la república sin fronteras que es internet, hay una sociedad que todavía
no aprecia las posibilidades de interacción que ofrece la red. La
comunicación bidireccional, una característica que la distingue de otros
medios, es soslayada por la mayoría de los usuarios mexicanos, quienes
consumen los mensajes de otros pero muestran poco interés en generar
contenidos propios.

Esta tendencia, considera el teórico de los medios de comunicación Raúl
Trejo Delarbre, autor de La nueva alfombra mágica. Usos y mitos de internet,
la red de redes y director de la revista Etcétera, es sólo uno de los rasgos
que obstaculizan el aprovechamiento de este medio de comunicación y, aunque
en el último año el porcentaje de usuarios ha crecido según los resultados
de la séptima encuesta de Consumo Cultural y Medios de REFORMA, es necesario
que la sociedad mexicana defina qué quiere de internet y que el Gobierno
desarrolle una política nacional que acerque a todos a las nuevas
tecnologías.

Mientras portales importantes anuncian su cierre o recortes de personal, la
encuesta indica que los usuarios de internet han aumentado en el último año,
¿cómo inversionista confiaría en estos números?

En México tuvimos un boom acerca del rendimiento que podían tener los
negocios en internet y esto condujo a inversiones apresuradas que ahora
redundan en pérdidas catastróficas. Otro problema es la ausencia de datos
serios sobre los medios de comunicación; no contamos con una institución
pública capaz de dar a conocer los tirajes de los diarios, las audiencias de
la radio, los ratings de la televisión. En el caso de internet, se ha
confundido su alcance local y se han mezclado los datos nacionales con los
internacionales.

Hace un año veía datos de empresas internacionalmente serias, pero
localmente poco cuidadosas, que hablaban de que en México había 12 o 15
millones de usuarios, cuando hoy debemos estar cerca de los 3 millones;
estas proyecciones indicaban que en el 2005 más de la mitad de la población
estaría conectada, cuando no tenemos recursos, tecnología ni cultura para
que eso ocurra. 

¿Cómo se han modificado los medios tradicionales a partir de la irrupción de
internet?

No advierto que haya un cambio notable, internet sigue siendo un recurso
complementario; está de moda dar en televisión y radio el correo electrónico
y las direcciones de páginas web, pero no encuentro todavía ejemplos de
experiencias en las que se traten de aprovechar las ventajas interactivas de
internet tanto para relacionarse con la gente como para enriquecer su
capacidad informativa.

Estaba viendo una encuesta en Europa la semana pasada en la que el 60 por
ciento de los periodistas acostumbra revisar internet para nutrirse,
aprender, documentar sus noticias. En México no tenemos encuestas, pero no
creo que vaya más allá de unos cuantos puntos porcentuales.
Un porcentaje alto de los encuestados contestó que busca páginas de
entretenimiento en internet y ha dejado de ver televisión o de leer para
dedicarse a navegar.

Habría que matizar la pregunta porque es muy general; honestamente no creo
que el 49 por ciento ya no vea televisión, quizá ve media hora menos. La
ventaja de internet es que puedes realizar en horarios nuevos tareas que
antes se hacían en la oficina, en la escuela; lo que debemos hacer ahora es
investigar cómo se realiza este consumo cultural mucho más allá de los
porcentajes de tiempo que destinamos a cada tarea.

Puesto que internet supone un nuevo paradigma de comunicación, ¿cómo piensa
que se modificará la relación de los usuarios con la información?
La teoría nos diría que, en vista de que todos los medios que hemos conocido
hasta ahora son de propagación unilateral --unos cuantos transmiten para
muchos--, y de que este medio permite una comunicación bidireccional, la
gente creará sus propios mensajes y complementará la información de los
medios convencionales, dando lugar a una nueva sociedad participativa. Lo
que hemos visto hasta ahora es que las posibilidades interactivas y la
capacidad de colocar los propios mensajes que da internet a los ciudadanos
es poco apreciada e interesante para muchos de los usuarios: menos del 10
por ciento de los internautas del mundo crean páginas web y la mayor forma
de interacción que se utiliza es el correo electrónico. No tenemos una
sociedad con cultura cívica, ciudadana de la red de redes, sino una sociedad
consumidora, para emplear el símil de Néstor García Canclini. Tenemos
internautas que consumen los mensajes de otros, pero que no se asumen como
ciudadanos de esta república sin fronteras con espacios nacionales muy
delimitados que es hoy en día Internet.

En el 98 se hablaba de que México enfrentaba un "analfabetismo informático",
al tener sólo el 3 por ciento de personas conectadas a la red en relación al
resto del mundo, ¿esto ha cambiado?

Según mis cuentas el porcentaje era menor. Emplear internet no es tan
sencillo como tomar un texto y leerlo. La alfabetización informática tiene
que pasar antes por el equipamiento y la construcción de una infraestructura
suficiente para que los mexicanos tengan acceso. El problema es que
internet, como toda nueva tecnología, reproduce, más que eliminar, las
desigualdades de una sociedad como la mexicana. Por su cercanía con Estados
Unidos, México entró rápido a internet, pero no lo aprovechamos, ya que fue
uno de los pocos países que no contó con una política nacional para la
promoción de internet. El Gobierno anterior decidió que internet era asunto
de las empresas privadas, y que la política nacional se iba a limitar a
promover la red dentro de la administración pública, al extremo de que el
Plan Nacional de Desarrollo Informático no menciona siquiera la palabra
internet. Ahora, el Gobierno de Fox ha dicho que pugna por una sociedad más
informatizada, pero no está clara cuál va a ser su política. Me temo que, al
decir que ahora sí hay una política informática, se repita el principal
error del Gobierno zedillista: hipotecar el desarrollo informático de México
a las prioridades de las empresas estadounidenses.

¿Piensa que hemos sido demasiado optimistas respecto a las posibilidades
comunicativas de internet?

Unos sí y otros no. No hay que creer las utopías interesadas de figuras como
Bill Gates o Nicolas Negroponte, quienes hace varios años dijeron "esto ya
cambió a la humanidad"; no es cierto, va a contribuir al cambio de la
sociedad en un mediano plazo, pero hasta que haya mucha más gente
involucrada con internet.

Se dice que internet dará origen a una nueva sociedad.

La sociedad va cambiando. La nueva sociedad, dicho así sin precisiones, me
parece tan dogmática como el hombre nuevo del que hablaba el Che Guevara
hace 30 años y en el que muchos creímos, pero más allá de las ganas de creer
nos falta con qué sustentar esa colección de dogmas. El problema sería cómo
lograr que internet construya una sociedad realmente nueva, cómo potenciar
sus capacidades virtuosas y no sus capacidades para que la gente
involucione, cómo lograr que sus contenidos creativos sean los que
prevalezcan y no los contemplativos o perversos. No basta con los buenos
deseos, nos hace falta educación, nos hace falta que los medios de
comunicación entiendan internet en toda su complejidad y que la sociedad
obligue al estado a tener esas políticas de las que carecemos.

Haría falta también una legislación, porque hasta ahora la red se
autoregula.

No creo que haga falta; hay que reconocer que el ciberespacio es un
territorio no ajeno a las legislaciones nacionales. Lo que es ilegal en la
vida real también lo es en la virtual. Hay que pensar en una dimensión
adicional a la nacional que no parta de la actuación de los gobiernos para
que se pueda mantener la relativa autonomía y la efectiva libertad que hasta
ahora sigue distinguiendo a internet.

¿Cuál sería el escenario virtual del futuro de internet en México?

El escenario virtual tiene que ser muy real, porque uno de los problemas es
que hemos tenido imágenes adulteradas sobre lo que es internet. Necesitamos
saber cómo se usa internet en México y qué queremos como sociedad de
internet.

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nos vemos en el futuro.

ilich.
editor @ large, sputnik.

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